Internet nos ha acercado a modalidades novedosas de negocios,sin necesidad de acudir físicamente a las instalaciones de alguna institución financiera. Las oportunidades de negocios son más amplias, al igual que la posibilidad de caer en manos de alguna entidad “financiera” que te ofrezca ganancias para competirle a Slim en muy poco tiempo. Lo peor es que estas farsas debilitan la confianza y la reputación de instituciones serias que sí operan legalmente.
La impunidad se alimenta de tres panes: de la corrupción, del silencio de las víctimas y de la negligencia de los ciudadanos. Como ya había publicado en un anterior artículo titulado “Ten cuidado al usar Plataformas Tecnológicas de Inversión”, existen algunas páginas de internet que te ofrecen servicios financieros y opciones de inversión muy prometedoras. Una de ellas que aparece en la red promete una ganancia diaria aseguradísima de 2 centavos de dólar por cada dólar “invertido” en un “bróker” mexicano que se ostenta operar todos los días en el mercado de divisas (ese mercado cierra los viernes por la tarde y abre nuevamente el domingo por la tarde, según nuestros husos horarios en México), es decir, que entre más plata le metas, más oro ganas.
Este tipo de empresitas, “brókers” de papel y demás páginas que ofrecen yates y vacaciones en las Islas Caimán (que ni a lagartijas pueden cumplir) solo buscan un objetivo: Que tú vacíes tus bolsillos, tus ahorros, hasta el dinero del “domingo” que pensabas darle a tu hijo, y se los entregues a sus pies, con la ilusión de multiplicarlo rápidamente. ¡No lo hagas! Mejor opta por lo siguiente:
Si alguien te ofrece esos sueños de caramelo financiero, pero nunca te exhibe su autorización de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores para brindar servicios financieros, por lo menos en trámite, te invito a que acudas a la siguiente liga: https://www.cnbv.gob.mx/Paginas/Quejas-y-Denuncias-de-ENS.aspx aquí tienes la oportunidad de parar en seco a aquellos estafadores que se ostentan como brókers, dealers, o el nombre apantallador que se pongan.
Esta liga que te presenté te da la oportunidad de plasmar datos, como el nombre de la institución, el teléfono (esas estafas suelen usar WhatsApp o Telegram) o la página de internet que usan, así como anexar pruebas que estimes pertinentes, como las fichas de depósito si es que ya les diste dinero, correos electrónicos y capturas de pantallas de los mensajes que hayan intercambiado y… te recomiendo si es que hiciste algún depósito considerable y deseas recuperarlo… capturas de pantalla de tus datos personales y de la supuesta inversión en la página de la plataforma, plasmados en una fe de hechos por parte de un fedatario público.
Esta clase de páginas incurren en delitos adicionales, como son en materia de datos personales y hasta fiscales al emplear como cuentas bancarias receptoras aquellas destinadas supuestamente a fines exentos de impuesto sobre la renta como la educación. Así que ¡A darle duro a esos estafadores!