Si abres una cuenta bancaria en México, te darás cuenta de que te piden tu huella digital. Y cuando utilizas la aplicación móvil te piden una selfie (sin filtros de perrito). Misma situación ocurre al pedir una firma electrónica en México. Tienes que aceptar que te tomen las huellas de los dedos de la mano, una fotito de tu carita feliz y de tus ojitos azules.
Si te han pedido estos requisitos debes saber que se tratan de datos biométricos ¿Te has preguntado por qué te piden esto?
¿Qué son los datos biométricos?
El Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (para más rápido se abrevia INAI) los define de esta manera:
“Propiedades físicas, fisiológicas, de comportamiento o rasgos de la personalidad, atribuibles a una sola persona y que son medibles”
(Información tomada de la Guía para el tratamiento de datos biométricos del INAI, lo puedes leer en este enlace).
Es decir, son aquellos rasgos físicos que te distinguen como individuo y que nadie más tendrá. Por ejemplo, solo tú tienes las huellas de tus dedos y ese modelo nadie más lo tiene. Desde que estuvimos en el vientre de la mamá nuestro ADN “configuró” nuestras futuras yemas de los dedos.
Para que se puedan considerar datos biométricos, los rasgos físicos deben cumplir cuatro características:
- Universales. Deben formar parte de la naturaleza del hombre en general: retina, iris, orejas, silueta de la boca, geometría de la mano, dedos… Por ello tu teléfono de la manzanita no se clasifica como dato biométrico, porque no todos lo tenemos.
- Singulares. Aunque son rasgos universales, tienen sus diferencias.
- Permanentes. Se mantienen a lo largo de la vida de la persona. Ejemplo: hay vatos que se borran las huellas de los dedos para ocultar su identidad, pero no pueden alterar los patrones de los vasos sanguíneos del iris.
- Medibles. Pueden medirse a través de recursos tecnológicos. Por eso se llaman biométricos, bio (vida, del organismo) + métricos (medida).
Razones de pedir los datos biométricos
Los datos biométricos son solicitados en diferentes trámites administrativos para reducir la probabilidad de una suplantación de identidad. Es por ello que al tramitar tu firma electrónica te toman fotos de tu cara e iris, huellas y te piden tu firma autógrafa. Estos datos los combinan y los relacionan con tu archivo .CER y .KEY, tus llaves pública y privada, respectivamente. Esto es una explicación simplificada del porqué te piden tus biométricos.
Si abres una cuenta bancaria o un perfil en un exchange para comprar criptoactivos con dinero fiduciario (peso, dólar, euro…) también te pedirán algunos biométricos. ¿Por qué? Lo hacen por un protocolo conocido como KYC (Know your customer o “Conoce a tu cliente”). Esto lo hacen para cumplir con las obligaciones en materia de prevención de lavado de dinero. Esto te explica porqué son comunes los prestanombres para manejar cuentas bancarias de actividades sospechosas, los verdaderos lavadores no quieren ser identificados.
¿Constitucional o no? Por ahora no es el objetivo de este trabajo tocar dicho punto. Pero espero que puedas aportar tu opinión en mis redes sociales.
Así que la próxima vez que vayas al banco, al SAT o a comprar criptos, si te piden los biométricos no tendrás el temor de que te vayan a encuerar.